Esta es una receta de bizcocho muy sencilla de preparar y que se puede adaptar a los gustos de varios comensales para que cada uno pueda disfrutar de su sabor favorito. El aspecto que tiene este bizcocho es este:
Al pincharlo para ver si estaba hecho por dentro salió uno de los lados algo más hinchado que el otro, pero como el sabor no cambia, no importa demasiado. Los ingredientes que necesitaremos son:
- 4 tazas de harina de repostería
- 2 tazas de azúcar
- 4 huevos frescos
- 2 tazas de leche
- 2 cucharadas de café soluble descafeinado
- 2 cucharadas de levadura química (polvo de hornear)
- Un poco de mantequilla para engrasar el molde
Precalentamos el horno a 170º C con calor arriba y abajo. Vamos a preparar dos tipos de masa, por lo que necesitaremos dos boles y en cada uno colocaremos la mitad de los ingredientes.
Empezamos poniendo en cada bol dos huevos y una taza de azúcar, que mezclaremos muy bien hasta que esté bien integrado. Añadimos una taza de leche en cada bol y seguimos removiendo bien.
Tamizamos dos tazas de harina y una cucharada de levadura en cada bol, y en uno de ellos incorporamos las dos cucharadas de café soluble. Removemos todo muy bien hasta obtener una crema lisa y suave.
Ahora es el momento de mayor tensión, que consiste en coger con cada mano un bol y volcar la masa a la vez en un molde engrasado con mantequilla, procurando que caiga la misma cantidad de masa a la vez.
Ponemos el horno con calor solo abajo e introducimos el molde del bizcocho. Horneamos durante 50 minutos, y comprobamos que está hecho por dentro pinchando con un palillo. Si sale seco está bien cocido. Sacamos el horno y lo dejamos enfriar.
