Vamos allá con una nueva receta de esas que tanto nos gustan por su sencillez. Esta es una preparación muy socorrida porque no se tarda mucho en hacer y además porque resulta bastante económica, pues lo que es algo más costoso son los embutidos y estos los podemos elegir en función de nuestro bolsillo o incluso aprovechar algunos restos que nos anden dando vueltas por la nevera.
- 600 g de patatas
- 3 huevos
- 2 dientes de ajo
- Embutido curado (chorizo, salchichón, lomo, jamón...)
- Aceite de oliva
- Sal
Lavamos y pelamos las patatas. Las cortamos en rodajas finas como para tortilla y las metemos en un recipiente apto para microondas. Añadimos medio vaso de aceite de oliva y un poco de sal, removemos y cocemos en el microondas entre 10 y 15 minutos, en función de la potencia, hasta ver que las patatas está tiernas.
Batimos ligeramente los huevos y los añadimos a la patata, removiendo para que se mezclen. Veremos como el huevo se cuaja un poco como consecuencia del calor de las patatas.
En una sartén ponemos una cucharada de aceite y doramos los ajos muy picados. Picamos el embutido muy fino y lo rehogamos con el ajo, tras lo cual le añadimos las patatas. Vamos removiendo a fuego fuerte y cuando veamos que el huevo está a nuestro gusto servimos en un plato y llevamos a la mesa.
Como ya os he dicho, los embutidos son a vuestra elección, solo tener en cuenta que sean curados. Podéis usar una punta de jamón, un pedazo de lomo embuchado que haya quedado, algo de chorizo, etc. Por eso no os he puesto la cantidad. Espero que os animéis a preparar esta receta y si os gusta no olvidéis compartirla. ¡Un abrazo!